1. Adventures in Modern Recording (7:12)
2. Beatnik (3:38)
3. Vermillion Sands (7:12)
4. I Am a Camera (4:56)
5. On TV (3:48)
6. Inner City (3:22)
7. Lenny (3:12)
8. Rainbow Warrior (5:22)
9. Adventures in Modern Recording (reprise) (0:51)
Trasera del librillo del CD.
No sé si se le dio mucho bombo en su día a la inclusión de los miembros The Buggles en Yes para la grabación y gira de Drama, sobre todo porque el progresivo ya no estaba en su mejor momento, pero es bien sabido que el dúo se quemó muy rápido. También desde dentro hacia afuera. Para cuando Trevor Horn se empeñó en lanzar un segundo álbum, hasta Geoff Downes tenía pie y medio fuera de The Buggles, dándose la extraña situación de que Bruce Woolley, que -recordamos- dejó el grupo antes de lanzar primer álbum y le intentó hacer la competencia con las canciones que tenían en común, se ofreció a volver y echar una mano. Podemos considerar grosso modo que Adventures in Modern Recording (1981) es un álbum de Trevor Horn con los otros dos Buggles como colaboradores. Y también es un trabajo crepuscular pese al brevísimo recorrido de la formación, el último capítulo de un libro de dos capítulos. Me refiero a que en él se respira, escuchado hoy a sabiendas de lo que pasó, un clima enrarecido de incertidumbre comercial que su autor principal lucha por compensar con un mayor espíritu experimentador. Trevor Horn consigue morir con las botas puestas.
Adventures in Modern Recording contiene una colección de canciones más diversas entre sí que las de The Age of Plastic, pero en este caso no sé si eso es una virtud. El álbum anterior era más sólido y entraba de un tirón, mientras que la variedad del que nos ocupa hoy lo hace sonar un poco deslavazado, y deja menos poso. Eso no quita que volvamos a encontrar aquí temas excelentes, como el single principal I Am a Camera, que es una versión distinta del Into the Lens del álbum de Yes Drama.
Geoff Downes, Trevor Horn y una tele que no era 4K.
Adventures in Modern Recording contiene una colección de canciones más diversas entre sí que las de The Age of Plastic, pero en este caso no sé si eso es una virtud. El álbum anterior era más sólido y entraba de un tirón, mientras que la variedad del que nos ocupa hoy lo hace sonar un poco deslavazado, y deja menos poso. Eso no quita que volvamos a encontrar aquí temas excelentes, como el single principal I Am a Camera, que es una versión distinta del Into the Lens del álbum de Yes Drama.
Vídeo oficial de I Am a Camera.
I Am a Camera Es más sencilla que Into the Lens, con menos aderezos (no están ahí los requiebros de guitarra de Steve Howe), pero para mi gusto la de Buggles es incluso mejor que la de Yes, con un tremendo sonido de vocoder y un punto de melancolía magnífico. El tema inicial y homónimo al disco tampoco está mal, pero creo que está sobretrabajado de cara a una espectacularidad un pelín impostada y sus cambios de tono no funcionan del todo. Termina muy bien el álbum, antes del epílogo, con Rainbow Warrior ("Guerrero del arcoíris") que, supongo, hace referencia al famoso barco de la ONG ecologista Greenpeace.
Adventures in Modern Recording
Rainbow Warrior
Y luego están los temas que, aun teniendo su mérito en la instrumentación y la producción, me resultan un poco tontos, como Beatnik, o machacones como Lenny. On TV funcionaría en todo caso como el tributo más obvio imaginable a The Robots de Kraftwerk, incluso a su videoclip, y Vermillion Sands se me queda en la tierra de nadie de la medianía. Como decíamos, es muy probable que Horn y compañía estuviesen más volcados en la innovación que en deleite melómano, y es que Adventures in Modern Recording ("Aventuras en la grabación moderna") está considerado como uno de los primeros álbumes en utilizar samples, fragmentos musicales pregrabados. Mucho de lo que escuchamos en este trabajo enlaza de manera directa con el que sería su siguiente gran proyecto personal, Art of Noise, para el que los samples lo eran todo.
On TV
El comentarista del blog José Ramón me pedía alguna anécdota más del anterior The Age of Plastic, y aquí va una muy buena: varios críticos señalaron el parecido sonoro del primer LP de The Buggles con el álbum Consequences (1977) de Godley & Creme, un trabajo conceptual en 3 discos sobre un abogado alcohólico que intenta concertar un divorcio mientras el inquilino del piso de abajo, un músico al que ven por un agujero, intenta protegerlos a todos de un apocalipsis climático gracias a ciertos conocimientos esotéricos. ¡Y como son las cosas! Lol Creme, uno de los autores de esta bizarrada, formaría parte posteriormente de Art of Noise junto a Trevor Horn y una troupe variopinta en la que ni siquiera todos eran músicos. Entre ellos estaba la compositora Anne Dudley, que en Adventures ya figura bajo seudónimo. Dios los crea y ellos se juntan.
We Can Fly from Here 1 y 2
Por ir cerrando de manera exhaustiva esta tanda de entradas, recordaremos que una edición expandida del álbum que nos ocupa incluye las dos partes del tema We Can Fly from Here, que The Buggles ofrecieron para el Drama de Yes pero terminó por dar origen y título al álbum de la banda progresiva publicado en 2011. Como en The Age of Plastic, esta edición de Adventures ofrece también versiones editadas de temas del álbum y alguna pieza descartada. Es mucho más recomendable que el álbum original a secas. Y para concluir del todo, recordaremos que en 2010 se produjo el primer concierto propiamente dicho de The Buggles, llamado The Lost Gig. Fue en un pub de Londres, por motivos benéficos, con artistas invitados, con presencia de la realeza, y se interpretó The Age of Plastic en su totalidad. Hay vídeos. Volvemos otro día con otra cosa.
Vídeo Killed the Radio Star