1. Main Title (3:09)
2. Surprise Attack (5:08)
3. Spock (1:13)
4. Kirk's Explosive Reply (4:03)
5. Khan's Pets (4:20)
6. Enterpirse Clears Moorings (3:34)
7. Battle in the Mutara Nebula (8:04)
8. Genesis Countdown (6:37)
9. Epilogue / End Title (8:44)
Aunque pensaba limitarme a una revisión general de la saga Star Trek a nivel musical, la importancia y la fama de esta primera secuela hacen necesario su análisis pormenorizado. Es indudable que La ira de Khan (1982), tanto la película como la banda sonora, son referentes de primer orden entre los trekkers, y ha sido al plantearme su análisis cuando he tomado conciencia de las bondades de este trabajo temprano de James Horner. Al final, todos contentos.
Contraportada de la edición original en vinilo.
Como dijimos en la entrada anterior, Star Trek: la película no llegó a alcanzar las cotas de popularidad y éxito económico esperados, y este fue seguramente el momento en el que la Paramount llegó a una conclusión que marcaría toda la saga cinematográfica hasta tiempos muy recientes: las películas de Star Trek no estarían nunca tan destinadas al público general como a los fieles fans de la saga en particular, por lo que se podía dejar de lado la grandilocuencia y el espectáculo visual de su primera entrega, en favor de -de algún modo- continuar con el espíritu de la serie clásica mediante filmes que retomasen su sabor sencillo y aventurero. La modestia de medios se tradujo también en que Star Trek II tuviese un presupuesto escandalosamente inferior a la anterior, y de ahí que la película no haya resistido demasiado bien el paso del tiempo en lo que a estética (efectos especiales, decorados, pectorales de plástico) se refiere. La mejor manera de hacerla un producto interesante en su momento fue centrarse en el guión y los personajes, y aquí se logró dar en el clavo con creces. La ira de Khan se centra en la venganza de un villano "de turno" de un episodio de la serie, que regresa del exilio para hacer la puñeta a Kirk, Spock y compañía. Se tuvo también la osadía de terminar la película con un final pesimista, a la espera de una tercera parte. Encontró William Shatner, además, su célebre momento de gloria en la cultura pop...
Buscando la economía a todos los niveles, el nuevo director Nicholas Meyer prescindió del importante caché de Jerry Goldsmith para contratar a un joven y más barato compositor llamado James Horner, responsable de algunas músicas para películas de ciencia-ficción de serie B de la factoría Roger Corman como Humanoides del abismo o Batalla más allá de las galaxias (Los siete magníficos del espacio). Como todos sabemos, Horner se acabaría convirtiendo en uno de los músicos más prolíficos y representativos de las siguientes dos décadas, y es de justicia decir que Wrath of Khan es el trabajo en el que puso por primera vez sobre la mesa las claves de su estilo plenamente configuradas, antes de empezar a reutilizarlas con más o menos picardía en múltiples ocasiones.
Para empezar la disección de Star Trek II hay que recurrir a una curiosidad. ¿Recordamos que Jerry Goldsmith compuso un tema principal para la primera entrega que fue rechazado por ser demasiado "náutico"? Pues James Horner aborda tanto el estupendo tema de los títulos iniciales como gran parte de la partitura de la secuela como si de un filme de piratas se tratase, con resultados prácticamente perfectos. Si alguien no pilla del todo lo de las películas de barcos, que escuche el corte titulado Enterprise Clears Moorings y lo entenderá en seguida. Este enfoque determina que tanto la banda sonora como la propia película adquieran exactamente el tono aventurero y más o menos ligero que se buscaba, de nuevo dotando al conjunto de hermosos ribetes fantásticos y románticos. Horner no rompe las bases de Goldsmith, pero sabe reconducir los conceptos hacia su terreno un poco más folletinesco y pulp.
Lo más sobresaliente de esta banda sonora, no obstante, es la música incidental. Temas como Battle in the Mutara Nebula o Genesis Countdown contienen una música épica espectacular, delicada y elaborada hasta el extremo, dotada de un aura optimista y luminosa difícil de describir. Vuelve a emplear Horner los efectos electrónicos de la BSO anterior, en este caso de manera incluso más efectiva, mejor integrada en la partitura, como haría en años venideros en otras películas. Lucen especialmente bien en Spock, un estupendo tema para el primer oficial de orejas puntiagudas que, en principio, parecía destinado a abandonar formalmente la franquicia por decisión de su propio intérprete, Leonard Nimoy. No voy a recordar su dramático final, porque es de sobra conocido, y una escena emocionante de verdad.
Hay tiempo de escuchar un típico tema musical para momentos asquerosos/desagradables a base de violines chirriantes, como es Khan's Pets; el conocido "parabará" marca de la casa Horner en Surprise Attack; y por supuesto un tema final a modo de suite resumen. Este excelente trabajo fue bastante maltratado en su edición discográfica original, aunque en 2009 se publicó una edición expandida muy cuidada que, por supuesto, es la más recomendable.
Buscando la economía a todos los niveles, el nuevo director Nicholas Meyer prescindió del importante caché de Jerry Goldsmith para contratar a un joven y más barato compositor llamado James Horner, responsable de algunas músicas para películas de ciencia-ficción de serie B de la factoría Roger Corman como Humanoides del abismo o Batalla más allá de las galaxias (Los siete magníficos del espacio). Como todos sabemos, Horner se acabaría convirtiendo en uno de los músicos más prolíficos y representativos de las siguientes dos décadas, y es de justicia decir que Wrath of Khan es el trabajo en el que puso por primera vez sobre la mesa las claves de su estilo plenamente configuradas, antes de empezar a reutilizarlas con más o menos picardía en múltiples ocasiones.
El tema principal de The Wrath of Khan.
Para empezar la disección de Star Trek II hay que recurrir a una curiosidad. ¿Recordamos que Jerry Goldsmith compuso un tema principal para la primera entrega que fue rechazado por ser demasiado "náutico"? Pues James Horner aborda tanto el estupendo tema de los títulos iniciales como gran parte de la partitura de la secuela como si de un filme de piratas se tratase, con resultados prácticamente perfectos. Si alguien no pilla del todo lo de las películas de barcos, que escuche el corte titulado Enterprise Clears Moorings y lo entenderá en seguida. Este enfoque determina que tanto la banda sonora como la propia película adquieran exactamente el tono aventurero y más o menos ligero que se buscaba, de nuevo dotando al conjunto de hermosos ribetes fantásticos y románticos. Horner no rompe las bases de Goldsmith, pero sabe reconducir los conceptos hacia su terreno un poco más folletinesco y pulp.
Durante la siguiente escena escuchamos Enterprise Clears Moorings.
Lo más sobresaliente de esta banda sonora, no obstante, es la música incidental. Temas como Battle in the Mutara Nebula o Genesis Countdown contienen una música épica espectacular, delicada y elaborada hasta el extremo, dotada de un aura optimista y luminosa difícil de describir. Vuelve a emplear Horner los efectos electrónicos de la BSO anterior, en este caso de manera incluso más efectiva, mejor integrada en la partitura, como haría en años venideros en otras películas. Lucen especialmente bien en Spock, un estupendo tema para el primer oficial de orejas puntiagudas que, en principio, parecía destinado a abandonar formalmente la franquicia por decisión de su propio intérprete, Leonard Nimoy. No voy a recordar su dramático final, porque es de sobra conocido, y una escena emocionante de verdad.
Spock
Hay tiempo de escuchar un típico tema musical para momentos asquerosos/desagradables a base de violines chirriantes, como es Khan's Pets; el conocido "parabará" marca de la casa Horner en Surprise Attack; y por supuesto un tema final a modo de suite resumen. Este excelente trabajo fue bastante maltratado en su edición discográfica original, aunque en 2009 se publicó una edición expandida muy cuidada que, por supuesto, es la más recomendable.
Portada de la edición expandida.
3 comentarios:
En fin, como soy trekkie total de las peliculas de cine, encima que me toques esta peli y su banda sonora me llega al alma. Son dos maravillas y la sigo viendo continuamente. Aquí Horner está grandioso y como era primerizo aún no se le nota tanto las repeticiones y autoplagios a los que luego nos acostumbró. La edición expandida, cara e indispensable. Una gozada
Una de las mejores bandas sonoras de James Horner y una de mis favoritas.Una pena lo de su deceso ya que era un artista con un talento inmenso y que tenia mas proyectos por venir.
Conde, tal vez me equivoco, pero me parece que esos sonidos que citas del tema "Spock" no son electrónicos, sino que se obtienen con... (adivina...) ¡campanas tubulares! (je!), frotándolas de arriba a abajo con unos guantes concretos, ya no recuerdo si de tela o de plástico.
En el making of de 'Alien Resurrection', que ví hace muchísimos años por la TV, en el apartado dedicado a la banda sonora aparecía John Frizell explicando cómo lo hacen.
Saludos!
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