1. Logos / Pranking the Natives (3:01)
2. Spock Drops, Kirk Jumps (1:43)
3. Sub Prime Directive (2:23)
4. London Calling (2:09)
5. Meld-merized (2:40)
6. The Kronos Wartet (5:25)
7. Brigadoom (3:41)
8. Ship to Ship (2:50)
9. Earthbound and Down (2:37)
10. Warp Core Values (2:56)
11. Buying the Space Farm (3:17)
12. The San Fran Hustle (5:00)
13. Kirk Enterprises (3:00)
14. Star Trek Main Theme (3:25)
15. The Growl (US bonus Track) (2:56)
Si Star Trek (2009) fue todo un acontecimiento en la historia de la famosa franquicia espacial, su secuela Star Trek en la oscuridad (J. J. Abrams, 2013) fue la confirmación de que el nuevo rumbo se mantendría con toda su fuerza y su espíritu aventurero. Vale que la trama sea difícil de seguir a ratos, y vale también que alguna escena es un autohomenaje demasiado obvio, pero caramba, momentazos como el primer encuentro con los Klingon, o ese en el que el villano Harrison revela su verdadero nombre... en fin, son una gozada.
La edición "deluxe", limitada a 6000 copias.
Y en lo que toca a la banda sonora, solo se puede decir que Star Trek Into Darkness es una de las mejores de toda la saga, entre otras cosas porque Michael Giacchino logra pulir con sabiduría la principal pega de su predecesora -el exceso de temas de acción estruendosos-, ampliando también las sonoridades de su visión musical sobre la franquicia.
Lo primero que nos encontramos es un trío de temas, los tres primeros, que constituyen prácticamente una mini-suite tan perfecta como un mecanismo de relojería. No en vano, la secuencia inicial de la película es en sí una mini-trama al estilo de las aventurillas introductorias de las películas de Indiana Jones. Desde las profundas notas iniciales hasta la plena explosión de las mismas cuando vemos por fin el título de la película en pantalla, con la nueva fanfarria de Giacchino a todo tren, ya nos tiene en el bolsillo. El resto de la banda sonora es pura adrenalina, mucho más variada que la del filme anterior. Mencionaremos algunos temas interesantes.
London Calling
London Calling, lejos de parecerse al tema de The Clash (Michael Giacchino tiene la rara costumbre de poner nombres "cachondos" a muchos de sus temas en cualquier película), es una delicada pieza clasicista con el piano como estrella. Otros temas con largos fragmentos contemplativos son Brigadoom, Meld-merized o Buying the Space Farm, el tercero de los cuales es muy emotivo y concluye de manera explosiva tras un dramático crescendo.
Buying the Space Farm
The Kronos Wartet encarna musicalmente la visita de Kirk y los suyos al planeta Kronos, capital del Imperio Klingon. Giacchino no hace del todo un feo al tema de los Klingon que popularizase Jerry Goldsmith, ya que vuelve a utilizar un enfoque "bárbaro", tribal. Lo que sobresale aquí es el uso de un tremendo coro que interpreta cánticos -supongo que en lengua Klingon- furiosísimos. Desde luego, la sensación de peligro y amenaza que se transmite es digna de estos antagonistas habituales de la tripulación del Enterprise.
The Kronos Wartet
Buenos ejemplos de temas de acción son Ship to Ship o The San Fran Hustle, que aun siendo tan hiperactivos como los de la BSO previa, parecen mantener una coherencia interna y una naturaleza distintiva que los hace muy interesantes y efectivos aun separados de las imágenes de la película.
The San Fran Hustle
Como Giacchino no abusa tanto de su fanfarria como la vez anterior, sí que nos cuadra bastante bien la inclusión en el álbum de una versión "de concierto" de la misma, al completo y con todo su poderío, como tema final. Aunque no pueden faltar las ocho notas de la serie original, esta vez se opta por no incluir en el CD básico la sintonía completa, aunque sí que vuelve a estar en la película. Cabe mencionar, eso sí, que la edición estadounidense concluye con el tema The Growl, un bonustrack que recoge la pieza electrónica que se escucha durante una escena de discoteca.
Resumiendo, Star Trek Into Darkness funciona incluso como disco independiente gracias a su riqueza compositiva, al uso inteligente de temas conductores e, insisto, una mayor variedad de sonidos en su paleta musical. Como la película, una gozada que merece pasar a nuestra colección aun si estamos hablando de la cortita edición sencilla.
Star Trek Main Theme
Y con esto llegamos al final de la larguísima serie de entradas que llevamos más de un mes dedicando a Star Trek. Durante este tiempo, es cierto que me hubiese gustado hacer alguna pausa para comentar otros álbumes que se me venían encima (el primero que comentaré no será una sorpresa), pero decidí que merecía la pena completar la saga cinematográfica antes de pasar a otra cosa. Es cierto que en Internet abundan los análisis de estas obras, muchos de ellos más exhaustivos y mejores que los míos, pero humildemente creo que siempre he tenido -si queremos verlo como mi aportación distintiva- al menos ciertas dotes para la síntesis, con lo que espero llegar de manera más directa y con menos tecnicismos a algunos lectores. Esa ha sido siempre mi intención en Otras músicas. Otros mundos.
Lo mejor de este repaso de Star Trek, en fin, es que yo mismo he escuchado muchas horas de una música magnífica de la que antes solo conocía una parte minúscula, e incluso he visto películas de la saga para la ocasión. La experiencia me ha encantado y puedo decir que hoy me siento un poco más trekker. Y a mucha honra.
¡Larga vida y prosperidad!
Gran trabajo Conde, que ha sido un placer leer durante estas semanas. Enhorabuena.
ResponderEliminarY me alegro que ahora te gusten un poco mas estas películas.. muchas no son redondas, pero el conjunto las hace irrepetibles.
Buen trabajo. Ya te he dicho que disfruto mucho de tus entradas. Te tengo entre mis blogs preferentes y eso que lo mio es la fotografía.
ResponderEliminar¡Gracias!
ResponderEliminarGran trabajo. He leído las entradas y he rememorado todas y cada una de las bandas sonoras. No he podido voler a ver las películas por falta de tiempo, y no soy un poquito más trekkie sencillamente porque creo que no podría serlo más :)
ResponderEliminarEnhorabuena por el blog en general y por esta serie de entradas en particular.